Cómo recuperar la ilusión tras varias decepciones amorosas

La ilusión no debe consistir en encontrar un amor de pareja

¿Cuántas veces has pasado por una ruptura o simplemente una desilusión? Creo que duele igual en el momento, solo que dura menos.

Recuerdo que yo terminé con mi primer novio y fue el momento más doloroso, estaba en el cuarto de mis papás hablando con mi mamá supongo que le estaría contando lo que iba hacer y lo único que recuerdo fueron esas nauseas que sentí solo de saber que tenía que hacerlo, me sentía la peor mujer del mundo. No quería seguir con él, pero tampoco quería enfrentarme a ese amargo paso de terminar y que me odiara para siempre.

Creo que lloré incluso más que él. En las relaciones que tuve siempre fui yo la que puso fin, aunque en algunos casos la relación ya había terminado de alguna manera y simplemente era yo quien lo decía primero. Aunque no me gustaba ser yo la que pusiera fin, de alguna manera eso me daba cierto «poder».

También recuerdo haberme ilusionado con otros, que al final desaparecían. Eso duele mucho. Y más cuando sabes que desapareció, pero aun así lo buscas y llamas rogando una explicación. No existe peor humillación que la de ir detrás de alguien suplicando amor. A la tercera vez que me pasó decidí no buscarlo, pero seguía sin entender por qué me pasaba eso.

No sé cuántas rupturas y desilusiones viví, pero fueron varias y en vez de hacer algo para superarlas y recuperar mi amor propio, entré en un estado de «valemadrismo» donde todo me da igual. Y que vacía es la vida cuando solo te enfocas en encontrar el amor pensando que eso te dará la felicidad.

Entonces, ¿cómo podemos recuperar la ilusión y las ganas de vivir después de tantas desilusiones? Lo que te aseguro es que esa ilusión no está en conseguir ese amor de pareja. Tenemos que dejar de poner ese objetivo como número uno en nuestras vidas.

Viví muchos años de mi vida teniendo la idea de que si tenía una pareja sería feliz y todos mis problemas se resolverían. En ese momento no era consciente de esto. Es ahora cuando lo veo muy claro haciendo un repaso de aquella época. No fue hasta que toqué fondo y decidí hacer algo por mí, me di un año para mí misma en el que recuperé esas ganas de salir adelante, de conocerme, de tener un motivo real para vivir que dependiera solo de mí.

Olvídate de tener pareja, date un tiempo para ti y conócete. Descubre todo eso que tienes por ahí guardado, retoma cosas que te gusten y que dejaste por algun motivo. Date esta segunda oportunidad, la vida no es solo sobre encontrar una pareja, casarse y tener hijos. Olvídate de eso, ya llegará en el momento que tenga que llegar, mientras disfruta al máximo contigo misma. Es momento para ti, para cultivar tu amor propio, para encontrar la verdadera felicidad, un amor real, que eres tú.

Como coach del amor o love coach te propongo que reflexiones sobre este tema siguiendo estos pasos:

  • Detecta cuál es la creencia que esta bloqueando que recuperes la ilusión
  • No importa si te han dejado o has dejado

Una vez que descubras esa creencia, recuerda que la felicidad solo depende de ti y nadie más y pregúntate:

  • ¿Estás haciendo lo que realmente quieres y te gusta?
  • ¿Te gusta tu trabajo?
  • ¿Has logrado tus sueños?
  • Si te quedara un año de vida, ¿qué harías?
  • ¿Qué te hace feliz?
  • Si decidieras pasar el resto de tu vida sola, ¿qué harías para ser feliz?
  • ¿Qué te apasiona?

Dedícate tiempo a ti, haz las paces contigo y verás como empieza a crecer poco a poco el amor propio y la creencia de que tener pareja lo es todo irá cambiando a «quiero ser tan feliz haciendo lo que me gusta que me gustaría compartirlo con alguien».

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